Brasil: al menos un muerto deja revuelta en la cárcel de Cascavel

Según medios locales, la persona fallecida era un preso de la cárcel que fue decapitado por otros reclusos. Los familiares de los presos estuvieron el viernes a las afueras de la prisión esperando tener noticias de sus seres queridos. Informaciones extraoficiales hablan de un segundo muerto, pero las autoridades aún no lo confirman.

“La información que estamos pidiendo es una lista de las personas heridas, nada más que eso, porque hay muchas madres llorando aquí que no saben si sus hijos están allí realmente y si están vivos, si están en un hospital, si están heridos, muertos o mutilados allí adentro”, le dijo María, familiar de un recluso, a Reuters.

La revuelta comenzó el jueves por la tarde, y poco después la policía militar de Brasil comenzó negociaciones para poner fin al motín y liberar a los rehenes. Sin embargo, de acuerdo con información de Reuters, las partes suspendieron las conversaciones el viernes por la tarde. De acuerdo con medios locales, se trataría de un enfrentamiento entre dos grupos enemigos presentes dentro de la cárcel.

La prisión de Cascavel ya había sido escenario de una sangrienta revuelta. En agosto del 2014, dos presos fueron decapitados y otros dos arrojados desde el techo durante una revuelta en la que participaron unos 700 presidiarios. En esa ocasión, el motín comenzó por inconformidades de los presos respecto a la comida y la higiene del presidio, situación que fue aprovechada por las pandillas rivales para saldar cuentas pendientes.

Como la mayoría de los países latinoamericanos, Brasil tiene graves problemas de sobrepoblación y violencia carcelaria. De acuerdo con datos del Departamento Penitenciario Nacional (DEPEN) de Brasil, a enero del 2017 la capacidad oficial del sistema penitenciario brasilero era de 393.953 reclusos, mientras que la población real era de 644.575. Esto significa que el nivel de ocupación es del 163.9%.

Con Reuters