Sentencian a cadena perpetua al matrimonio que torturó a sus 13 hijos en EE. UU.

David y Louise pagarán cadena perpetua. Por torturar durante años a sus 13 hijos en la residencia familiar en la que vivían en el sur de California, este matrimonio estadounidense fue condenado por una corte estatal de Riverside.

Tras escuchar los testimonios de varios de los menores al relatar el maltrato al que eran sometidos, ambos bajaron la cabeza en medio de las lágrimas y les pidieron disculpas durante la audiencia en la que reiteraron la culpabilidad por 14 delitos que ya habían admitido en febrero.

En medio de la diligencia judicial, uno de los jóvenes reconoció tener pesadillas con los golpes que sus padres le propinaban a él y sus hermanos y dijo que solo hasta ahora se están recuperando de lo ocurrido.

Pese a la gravedad de los castigos que soportaban, varios de ellos indicaron que oran por su familia, que aman a sus progenitores y que han logrado perdonarlos, por lo que solicitaban que la sentencia no fuera tan “dura”.

Durante años, tanto la madre, de 50 años, como el padre, de 58, lograron ocultar con gran destreza la manera en la que criaban a sus pequeños, lejos de las relaciones con las familias.

La denuncia del caso y latente posibilidad de la libertad condicional

Entre los detalles que fueron entregados por la citada corte al término de la audiencia figura la posibilidad de que, al cabo de primeros 25 años en prisión, los sentenciados soliciten el beneficio de libertad condicional.

La detención de esta pareja se registró hace poco más de un año y tres meses, en enero de 2018, luego de que una de sus hijas reportara al servicio de emergencias, a través de una llamada a la línea 911, que varias de sus hermanas estaban encadenadas a las camas.

Para entonces, la menor que hizo la denuncia que permitió que las autoridades tomaran cartas en el asunto tenía 17 años y había conseguido escapar de su casa, que se encontraba ubicada en la localidad de Perris.

Los hijos de los Turpin, cuyas edades estaban comprendidas entre los tres y los 29 años, estaban en condiciones que, según las entidades de atención, eran insalubres. Varios sufrían desnutrición en un grado severo y todos habían sido encerrados en jaulas con cadenas y cuerdas.

Mike Hestrin, el fiscal de Riverside que admitió la declaración de culpa hecha por el matrimonio hace dos meses, aseguró que el de los Turpin es el caso “más horroroso” que haya visto, uno que marcó con golpes la vida de 13 niños.

Con EFE y AFP