Netanyahu y Gantz buscan la victoria electoral para desbloquear Israel
Primera modificación:
Serán las terceras elecciones en Israel en menos de un año. El primer ministro israelí, Benjamin Netanyahu, intenta mantenerse en el poder que ostenta desde hace diez años, mientras que su principal opositor, Benny Gantz, se acerca cada vez más a la victoria.
Por tercera vez en menos de un año, Israel acude a las urnas este lunes 2 de marzo para elegir primer ministro. Los contendientes son los mismos: el primer ministro y líder del Likud, Benjamin Netanyahu, y el candidato del partido Azul y Blanco, Benny Gantz.
La primera votación fue en abril de 2019, cuando ambos quedaron empatados en número de escaños, y la segunda se repitió en septiembre. En esa ocasión, Gantz logró superar por dos curules a Netanyahu, pero ninguno de los dos logró sumar una mayoría que le permitiera alcanzar la presidencia.
Desde entonces, se sucedieron meses de negocaciones fallidas con los ultraortodoxos, por parte de Netanyahu, y con el centro-izquierda por parte de Gantz. Sin embargo, los intereses partidistas terminaron pesando más que la gobernabilidad del país.
La corrupción acecha a Netanyahu
Estos comicios se ven como un plebiscito a Netanyahu, el hombre que lleva más años en el cargo de primer ministro de la historia de Israel. Diez años después de llegar al poder, su figura está debilitada por la investigación por corrupción que lo cerca.
La justicia israelí abrirá el proceso formal de investigación dos semanas después de las elecciones, según está previsto. Los cargos que enfrenta el primer ministro son de corrupción, malversación y abuso de confianza. A pesar de la acusación, Netanyahu decidió seguir con su campaña electoral.
"Un tercio de los electores que se nombran de derecha no están cómodos", afirma Yohanan Plesner, presidente del Instituto demócrata de Israel, un centro de análisis en Jerusalén. "Pero a la vez esto no se traduce en intención de voto, ya que la fidelidad (al Likud) se mantiene fuerte", agrega.
El plan de Trump aviva el voto árabe
Uno de los factores más importantes en estas elecciones será el voto árabe. Ya en los comicios de septiembre la participación incrementó un 1,5% en comparación a la contienda de abril a causa de un repunte inesperado de la participación de las comunidades árabes.
En esa ocasión, los partidos árabes israelíes lograron 13 curules en el legislativo, el Knesset, convirtiéndose en la tercera fuerza detrás del partido Azul y Blanco, con 33 asientos, y el Likud, con 32. El 2 de marzo podrían mejorar su resultado a raíz de la indignación creciente de la comunidad árabe por el llamado plan de pacificación de Medio Oriente de Donald Trump.
Tanto Netanyahu como Gantz apoyan el plan, que favorece los reclamos de Israel en la disputa territorial con Palestina. En cambio, los palestinos y la comunidad árabe se oponen a su implementación y denuncian que no tuvieron ningún tipo de participación en la elaboración del plan. Según una encuesta del 24 de febrero de la Universidad de Tel Aviv, el 80% de la población árabe está en contra de la propuesta de Trump.
Gantz, una cara nueva en la política
Gantz es el único político que ha logrado disputar seriamente el liderazgo de Israel a Netanyahu. Con 60 años, es una década más joven que su rival y es una cara reciente en la arena política del país.
El candidato del partido Azul y Blanco había sido jefe del Estado Mayor del Ejército israelí, nombrado hace ocho años por el mismo Netanyahu.
Se espera que su política internacional, de llegar a convertirse en primer ministro, sea más amable que la de Netanyahu, y algunos incluso consideran que su postura respecto al conflicto con Palestina es más blanda. Sin embargo, las dos guerras en Gaza entre 2011 y 2015 dejaron 2.300 personas muertas bajo su mandato en el Ejército.
Con Reuters y AFP
Boletín de noticiasSuscríbase para recibir los boletines de France 24
Suscribo